viernes, agosto 31, 2007

Odio Amarte

Amor: afecto por el cual busca el animo el bien verdadero o imaginado, y apetece gozarlo. Pasión que atrae a un sexo hacia otra persona. Esmero con que se trabaja una obra deleitándose en ella.

Odio: antipatía y aversión hacia alguna cosa o persona cuyo mal se desea.

¿Quién no ha sentido, alguna vez en la vida, alguno de estos dos sentimientos? Posiblemente los hayáis experimentado por separado, pero seguro que en alguna ocasión… Esos dos sentimientos tan opuestos entre sí, en un momento dado los podemos sentir entrelazados, y hacia una misma persona. Pero bueno…, empecemos hablando de amor.

¡El amor tiene infinitas caras! Yo siento amor por mi hija y por mis amigos más próximos, pero son distintos.

Por mi hija siento un amor tan grande, que daría la vida por ella sin pensarlo ni un segundo. Eso es porque la quiero tanto, que si ella no está bien, yo no estoy bien. Sé que la quiero porque cuando la llamo y hablo con ella siento una alegría que con ninguna otra persona he llegado a sentir. Cuando tengo un vis a vis con ella, ¡me cambia hasta la cara! Me pongo a jugar con ella como si tuviera su edad. Sé que hay mucha gente que lo hace siempre que hay un niño, pero yo nunca lo había hecho. Por eso, el hacerlo con mi niña, es algo nuevo para mí, y me gusta mucho. Sé que la amo porque solo con mirarla me da fuerzas para continuar en este sitio tan sombrío y triste. Sé que la quiero porque cuando veo algo en la tele, ya sea una película para niños, juguetes, parques de atracciones… cualquier cosa, me hace pensar en ella. Por eso, y por muchas más cosas, sé que la quiero.

También aprecio mucho a algunos de mis colegas. Son pocos, pero a esos pocos, los quiero mucho. Me preocupo por ellos. Si algo les va mal, intento ayudarles como sea. Cuando vienen a verme, me alegran el día. Esa es la diferencia entre mis amigos de verdad y otros amigos que alguna vez han venido a verme y no me importan tanto.

Yo suelo separar la amistad entre amigos y amigas. A un amigo lo puedo querer mucho, pero cuando es chica el trato hacía ella es distinto: ¡le demuestro más el cariño que siento! Antes tenía bastantes amigas, ya que les doy más oportunidades de conocerme. Hoy en día no tengo tantas amigas, pero tengo una a la que aprecio mucho porque desde que estoy aquí se ha comportado muy bien conmigo. Se ha portado mejor que muchos/as colegas que decían ser “amigos”. La verdad es que cuando estaba fuera, no tenía tanta confianza con esta amiga, pero ahora haría todo lo que estuviera en mis manos para ayudarla si le hiciera falta. Por eso sé que siento afecto por algunos de mis amigos.

Luego está la confusión… A veces tienes una amiga a la que quieres mucho y sabes que ella también te aprecia un montón. Con ella, seguro que compartes casi todos tus problemas y ella también lo hace contigo, siempre que está mal.

Lo que pasa, que sin darte cuenta te acabas enamorando. Hay muchos casos distintos. Puede ser que ella se enamore de ti, o los dos os enamoréis,… Yo del que quiero hablar es de cuando tú te enamoras y ella no lo sabe. Eso pasa por no aclarar las cosas, porque ella te trata tan bien, que tú crees que le gustas. Tal vez, sólo lo hace porque le importas mucho como amigo. Si desde el principio las cosas hubieran estado claras, eso no habría pasado. Tampoco es culpa de ella, ya que no lo hace queriendo. Somos los chicos los que siempre confundimos amistad con amor. ¡Al menos, eso pienso yo! Aunque también puede ser al revés, pero supongo que lo disimulan mejor. No sé, quizá sólo sea un capricho, ya que es lo que tienes más cerca en los momentos difíciles. Sea lo que sea, en estas situaciones hay que tener mucho cuidado, porque no debes olvidar, que ante todo, esa persona es tu amiga/o.

El odio. La verdad es que odio tener que seguir las normas tal y como las dictan. Supuestamente, los que las hacen saben como hay que comportarse en todo momento.

Odio a las personas, que por el estatus social que representan, creen que son superiores al resto de la humanidad.

Odio cuando tienes un hermano mayor y cree que lo sabe todo porque él ya lo ha vivido. ¡Te da consejos como si fuera tu padre!

Odio cuando hablas con alguien y se forma ese silencio incómodo en el que ninguno de los dos sabe que decir. Esos momentos los odio. Podría estar diciendo muchas cosas de las que odio, pero…

Realmente, del odio que os quiero hablar es de ese que se suele mezclar con el amor. Alguna vez, sientes amor por alguien y sin darte cuenta, acabas odiándolo. No estoy muy seguro de la razón por la que ocurre eso, pero creo que debe haber más de una. Debe pasar porque la otra persona no te ama como tú la amas a ella. Así, poco a poco, le vas cogiendo manía. Pueden ser celos, puede ser que quieras hacerte el duro delante de ella… Haces ver que ya no te gusta, y eso es sólo el principio, ya que empiezas por ahí y acabas odiándola.

Se puede dar también el caso contrario. En algún momento de tu vida puedes conocer a alguien y que la primera impresión no sea nada buena. Ves que esa persona te empieza a caer mal, pero también te das cuenta, que poco a poco, empieza a caerte mejor. Piensa que hasta puede llegar a ser uno de tus mejores amigos/as.

Tengo algún amigo al que quiero mucho, pero al mismo tiempo odio alguna de sus manías. Esta situación es una en las que se mezclan esos dos sentimientos. ¿Cómo puede ser que lo aprecie tanto, y a la vez lo odie tanto? Digo lo de odiarlo tanto, porque esas manías suyas me dan mucha rabia. Seguramente, a otra persona que tuviera esas mismas manías, no se las aguantaría. ¡Pero a mi amigo, se las aguanto! Eso también me pasa con alguna amiga. Hago ver que sus manías no me molestan, y creo que en realidad, en estos casos, aún soporto más. ¡No sé, será porque es mujer!

No sé, es raro esto de que se mezclen los dos sentimientos hacía una misma persona.

Espero que vosotros me digáis lo que pensáis y me escribáis anécdotas parecidas. A mí, se me hace complicado hablar de esto, y la verdad que no sé porqué… Espero que os haya gustado este nuevo artículo dedicado al amor y al odio que sentimos las personas hacía otras personas. Volveré a estar un tiempecillo sin escribir, porque el Omnia cierra por vacaciones. Así es que no podré ver vuestros comentarios hasta que el Òmnia abra.

Cuidaros mucho y hasta la próxima.

DUE